¡ABURRIDO!

¡ABURRIDO!

Esa es la palabra que utilizaríamos para definir lo que consideramos como un buen programa de entrenamientos en una sola palabra. Sí, ABURRIDO.

En el mundo actual, donde lo que reina es la gratificación instantánea, los kudos y los likes, estamos detrás de ese super workout, unos intervalos bestiales que se vean “por el libro” en la grafiquita, nos olvidamos del plan macro, el cuadro completo, “the big picture”.

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Como dice un dicho en el mundo deportivo, la consistencia vence a la intensidad. Para progresar, necesitamos tener buenas semanas, buenos meses, no UN buen entrenamiento en el cual logremos PR en par de segmentos, y mandemos los screenshots de nuestro super mega logro a nuestros chats de atletas.

¿Qué nos permite tener buenas semanas y buenos meses? Realizar la mayor parte de nuestro entrenamiento (cualquier disciplina) en nuestra zona aeróbica, dígase SUAVE / LRP / EASY o como quieran llamarlo. Entrenar suave nos permitirá mejorar nuestra capacidad de transportar y utilizar oxigeno para producir energía, haciéndonos mas rápido a largo plazo.

¿Por qué es difícil de entender? Porque este proceso no pasa en 2 dias, y es mas “chulo” subir a Strava que mi corrida de hoy fue 1 minuto más rápida que la de ayer. Al correr más rápido de lo que debería, le pongo más estrés a los músculos, tendones y huesos, además de que no me sirve como día de recuperación si el día anterior fue intenso. Correr suave es como comprar en oferta, tenemos más por menos, ya que obtenemos más beneficios por menos esfuerzo.

Ojo, esto no quiere decir que los entrenamientos de intensidad (repeticiones, fartleks, tempo, etc) no tienen lugar en un plan de entrenamiento, solo que la mayor parte del entrenamiento (70-80%) debe ser suave.

«No intentes construir un muro. No empieces un día y digas ‘Voy a construir el más grande y colosal muro que jamás se haya construido’. Di ‘Voy a colocar este ladrillo tan perfectamente como un ladrillo puede ser colocado’. Haz esto todos los días, y pronto tendrás un muro» – Will Smith.

Javier y Jenny